Este ícono ubicado en la ciudad de Quequén, sobre la Av. Almirante Brown a pocos metros de la Escollera Norte, fue inaugurado el 9 de octubre de 1999.

La obra del escultor Andrés Mirward, mide 35,70 metros de altura, y la imagen alude a los soldados caídos en acción durante el conflicto de las Islas Malvinas.

Simboliza una gran bandera Argentina y la madre patria surgiendo de ella sosteniendo al soldado caído. Además posee una fuente perimetral, representando las lágrimas de madres y padres.
Se halla orientado hacia la ubicación geográfica de dichas islas.